Primeramente quiero agradecer a Krish Ayub y Mauricio Párez (Chamaco) por los tres discos que voy a reseñar el día de hoy. Todo apuntaba a que por vez primera en 23 años, no me llegaría un envío registrado, afortunadamente sólo fue cuestión de darse una vuelta por la oficina de correos y listo, pero vayamos a las acciones. Segundo disco de esta banda que tiene su base principalmente en el estado de Querétaro, entregan en este Deathplague 9 temas + bonus track 38:55, con una presentación en digipack; el CD ha sido lanzado por Ablaze Productions y según comentarios de Juan Sandoval (El Platano) se le ha invertido mucho a este disco. y fue lanzado en el mes de diciembre pasado, así que es más un disco de este 2010. La portada me recordó a lo que se hacía allá por finales de los 80’s, en esos años en LP’s o sencillos que circulaban por todo el mundo, el detalle es que el diseño en general es como el disco de AC/DC o Metallica, todo en negro así que hay que ver a contraluz para poder leer y desde luego las huellas en el papel se hacen presentes, hay que tomar el disco con pinzas para que no se vea manchado. ¿Qué se puede esperar de una banda de Thrash en estos días? ¿Cuándo es su segundo disco después de 4 años de haber sacado el anterior? Muchos ya esperábamos con ansias esta segunda entrega después del aguerrido Libido Clerico, las expectativas sin lugar a dudas deben ser adquirir un disco cañero, directo, sin las poses que en estos días son pan nuestro de cada día, tal vez con la sospecha de tener una segunda entrega a manera de continuación del anterior trabajo. Lo primero se cumple, tenemos un disco con caña, como normalmente es el Thrash directo, intenso e insano. Lo segundo no se cumple, y en este sentido siempre habrá opiniones divididas, lo cierto es que la banda se renueva y nos presentan un Thrash que lo disfrutas de principio a fin, estructurado de tal forma que cada tema aunque es Thrash tienen su propia identidad y lo mejor es que suenan de tal manera que han tomado las mejores características del género en las diferentes escuelas, superando lo hecho en el disco anterior, han ajustado su sonido y suena más contundente. El disco abre con Faith No More, suena de inmediato una sección rítmica aplastante en el bajo y comienza el ataque sónico, no esperes un Thrash así bien pirateado de los 80’s para enarbolar falsamente la bandera del Thrash de aquellos años, la banda ha encontrado sentido en sus temas, hacen Thrash desde luego, pero con un sonido en la guitarra muy limpio, algunos riffs suenan melódicos sin que pierda potencia el tema, otro punto a destacar es que la voz suena diferente se ha puesto a la altura del sentido musical que ha tomado la banda, va más allá de la típica voz de Thrash ochentera, excelente forma de iniciar el disco, un tema intenso al 100% no da tregua. Ways Of Perdition continua en la misma línea que el anterior, con un sonido en la guitarra que será en este disco es el sello distintivo de la banda, no bien le estás tomando sabor al tema cuando este ya terminó y es que es sólo el preámbulo del siguiente. Bad Girls empieza con un diálogo que parece extraído de una película del cine mexicano de los 80’s, me hizo recordar a las Montenegro, las Chain’s, los Zayas, los Aberto’s Rojas ja ja ja (qué, qué, me van a decir que ustedes puro cine de arte, pues de su arte a mi-arte…), el tema habla de los placeres in-sanos de la cerveza, las mujeres y el poder oscuro, y si le agregas los riffs aplastantes de este tema, esto es un festín no sólo auditivo, en definitiva estos profanadores se lanzan a la yugular, atacan tus sentidos y tus creencias sin miramientos. La banda da un giro con Unfrightful so Dead Sons of a Bitch, tenemos un tema con más cambios de ritmo que los anteriores, de hecho empieza con un ritmo más lento que los anteriores, surgiendo de nuevo esos riffs, que insisto, suenan melódicos, al final tenemos un tema con una estructura un poco diferente, pero que no desentona con lo mostrado hasta el momento, la parte vocal muestra otras variantes, hay partes guturales, los cambios de ritmos son muy buenos y sin duda te harán mover la cabeza, está bien sacudirse el stigma de banda de Thrash Old School, es mucho mejor sonar a banda de este milenio, sin dejar de lado la vieja escuela y este tema es la mejor muestra ya que se nota a leguas la influencia de Tom Araya y sus huestes, al final se cumple el objetivo de no sonar descaradamente como en los 80’s, claro algunos argumentan que es una forma de rendir tributo a las bandas de los 80’s y pues también puede ser válido, para mi no tanto, cuestión de gustos. Siguiendo en la vena Slayeriana tenemos Trialed in Agony, con cambios de ritmo muy buenos y una base rítmica pegajosa, la voz con ese tono agresivo y que se ha mantenido como una constante, incluso por momentos emulando a Tom Araya. Deathplagued es el tema que más me ha gustado, y es como una especie de resumen de todo lo que encontrarás en este disco, cambios de ritmo precisos, voces agresivas y guturales, una base rítmica aplastante y un riff que suena melódico, muy sueco, el resultado es excelente. Y después… Presta pa’ndar iguales, lo bueno es que nomás es pal disco ¿será? Esta banda sigue profanando tus sentidos y nos recetan la asesina Crackonjuring, tema intenso, para armar un buen slam, mejor forma no pudieron escoger para terminar el disco, que goza de muy buen sonido, como ya lo había mencionado, superior y diferente a su anterior trabajo. Escondido y siendo el track 66 viene el tema Epidemic, tema original de Slayer, para remarcar quien reina en el Thrash Americano, una cosa es querer hacer un cover y otra hacerlo, Profanator demuestran de que están hechos y no sólo por sacar en forma excelente el cover sino por todo el disco que es más que recomendable, ponte en contacto con la banda o con el sello. Voices in My Head, Narcolatry y Trialed in Agony (así o más Slayer al inicio del tema) conforman este disco “THRASH METAL FOREVER…”
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